Benicarló, 15 de enero de 2019
- La fiesta de la alcachofa en Benicarló cumple 26 años brillando con fuerza en todos los actos convocados para ensalzar los beneficios de este cardo que cuenta con denominación de origen.
- La Dra. Crespo y el Endocrino Severino Boluda, máximos prescriptores de los beneficios médicos de la alcachofa.
Enero es el mes de la alcachofa, al menos en Benicarló, la población castellonense se haya completamente inmersa en los actos de celebración de su XXVI Festa de la Carxofa.
Desde el pasado 10 de enero y hasta el próximo el 2 de febrero, el Ayuntamiento junto con el Consejo Regulador de la Denominación de Origen y otros organismos se han volcado en organizar toda una serie de actividades y actos con el fin de promover el uso y los beneficios de este alimento.
Entre las actividades organizadas destacan las Jornadas de Pinchos, la Feria gastronómica, etc. en las que participan los establecimientos de restauración locales. Otra novedosa iniciativa son los viajes programados desde diferentes pueblos y ciudades de la Comunitat y que combinan el turismo cultural con el gastronómico.
Dentro del programa de actos oficiales, ayer por la tarde tuvo lugar en el Salón de actos de Caixa Benicarló una conferencia en la que la Dra. Crespo repasó los orígenes de la alcachofa y su relación con la fertilidad. Junto a ella, el endocrino Severino Boluda explicó el valor de la dieta mediterránea y los beneficios medicinales y nutricionales de la alcachofa.
Junto a ellos, asistieron su Excma. Sra. Dña. Xaro Miralles, Alcaldesa de Benicarló, el Presidente del Consejo Regulador de D.O, Concejales de Cultura de la localidad y representantes de Caixa Benicarló y de la cooperativa Benihort.
Un origen muy afrodisíaco
No hay constancia precisa sobre el origen de la alcachofa. Se cuenta que, según el mito griego, Zeus se enamoró de Cynara, una hermosa muchacha con el pelo color ceniza. Tras conquistarla, la llevo al Olimpo para que fuera su amante, Zeus estaba casado con Hera. Cynara, cansada de ser la amante de Zeus decidió abandonar el Olimpo y regresar a su casa. Zeus enfurecido por semejante humillación humana, le hizo crecer una especie de escamas a su alrededor dando origen así a la primera alcachofa.
Lo que si que se sabe es que los persas conocían sus propiedades, que los griegos y los romanos le atribuían potentes efectos afrodisíacos y que al ingerir esta alcachofa se aseguraban una descendencia de varones.
En el obscurantismo de la Edad Media, la alcachofa fue dejada de lado hasta que en el siglo XV, Catalina de Médici la popularizó en una cena ofrecida a la Corte Francesa en un castillo en el Valle de Loira. La Noche de Chenonceau dio mucho que hablar en ese momento ya que el plato principal del banquete consistía en fondos de alcachofas rellenos de riñones, mollejas de ternera y crestas de gallo, servidos por doncellas de poco recato y escasa ropa.
Así, hay constancia de un texto médico de 1576 que advierte que el jugo sacado de hervir las hojas y los tallos de la alcachofa «tiene la virtud de provocar a Venus para los hombres y a las mujeres las hace más deseables«.
Hacia el siglo XVII se recomendaba el consumo de fondos de alcachofas para reavivar la pasión en los matrimonios.
Los navegantes y comerciantes españoles y franceses llevaron la alcachofa a América y su cultivo se extendió en zonas de clima templado. Y es precisamente en California, en el condado de Monterrey, en un pequeño pueblo llamado Castroville, donde en 1948, una joven de 22 años rubia (como Cynara) y muy sensual llamada Norma Baker fue coronada como » Artichoke Queen » (Reina de la alcachofa). Este certamen fue el inicio de la carrera de un gran mito sensual: Marilyn Monroe.
¿Qué condiciona nuestra fertilidad?
La fertilidad es la capacidad de reproducirse (tener hijos). Viene condicionada por tres factores fundamentales:
- La edad
- El medioambiente
- Nuestra salud
Poco podemos influir sobre la edad, tan solo intentar educar a la población para que prioricen la reproducción en edades más fértiles. A nivel individual, poco podemos controlar el entorno en el que vivimos. Sin embargo, tener un buen estado de salud depende de nosotros, simplemente practicando lo que conocemos como “Hábitos saludables”.
Hábitos saludables
Sabemos que el tabaco, las drogas, el alcohol si no te matan …… te dejan estéril. Dentro de lo que conocemos como hábitos saludables de vida, la alimentación juega un papel fundamental en la fertilidad.
Necesitamos nutrientes que ayuden a mejorar la calidad del semen y de los óvulos (buena materia prima) y además, una vez logrado el embarazo, una gestación necesita mucha energía (buena gasolina), tanto para los embriones como para la gestante.
¿Qué tiene que ver todo esto con la alcachofa?
Por su composición la alcachofa es rica en:
- Macronutrientes como los carbohidratos. Ellos son los responsables de suministrar energía para que el aparato reproductor funcione.
- Antioxidantes que nos ayudan a favorecer la respuesta ovárica aumentando la cantidad de folículos y la calidad de ellos. Rica en vitaminas A, C y E. Además contiene, apigeina y luteolina a los que se le atribuye una acción inhibitoria de células cancerígenas: tanto del páncreas (Estudios in vitro en la universidad de Illinois) y del cáncer de pulmón (Instituto Catalán de Oncología).
- Omega 3 las alcachofas contienen ácidos grasos como el omega 3 que es un potente antinflamatorio que ayuda a la fertilidad regulando la producción de hormonas y aumentando el riego sanguíneo en el útero, imprescindible para que implante el embrión.
- Magnesio. Equilibra los niveles hormonales. Además, una vez conseguido el embarazo, el magnesio es fundamental en la formación de la placenta y de los tejidos fetales.
- La vitamina B en general es un “equilibrador” hormonal y en concreto el mioinositol , subgrupo de la vitamina B, que mejora el desarrollo y la calidad de los óvulos.
- Vitamina D. Existen números estudios que demuestran que unos buenos niveles de vitamina D favorecen la fertilidad en las mujeres. Esta vitamina es multitarea, apoya el sistema inmunológico, cuida de las tiroides, reduce la inflamación, todo ello fundamental para el buen estado reproductivo. En un estudio australiano publicado en Fertility and Sterility de 2018 se asocia el déficit de vitamina D neonatal con la esquizofrenia del adulto.
Y para acabar y como dijo Ludwig Feuerbach “Somos lo que comemos”.
La alimentación es la piedra angular sobre la que se articula nuestra salud. Recuerden, comer alcachofa es comer salud