Aunque todas las fases de un tratamiento de reproducción asistida son importantes, la transferencia embrionaria es un momento muy especial porque supone, no solo el final del tratamiento FIV sino, probablemente, también el inicio del embarazo.
Lo que denominamos habitualmente “el transfer”, consiste en depositar el embrión en el útero materno mediante un catéter muy fino y maleable que introducimos través de la vagina. Es un proceso breve, pero requiere de una técnica muy experimentada por parte de nuestras ginecólogas.
La transferencia embrionaria suscita dudas y es posible que quieras saber si la intervención puede resultar molesta o si tiene algún riesgo. Además, si estás pensando en someterte a un tratamiento de reproducción asistida, quizá te preguntes cuántos embriones se transfieren en un ciclo FIV.
Esta será una decisión muy personal, pero ¿qué criterios se siguen para llevarla a cabo? Veámoslo.
¿Cuándo se realiza la transferencia embrionaria?
El momento de la transferencia embrionaria se elige teniendo en cuenta muchos factores, pero los principales son:
- La calidad biológica de los embriones
- El estado en el que se encuentra el útero
- Y, dentro de este, las condiciones que presenta el endometrio
El objetivo prioritario, obviamente, siempre es conseguir el embarazo. Por eso, lo más importante es que el endometrio se encuentre receptivo y es con ese objetivo que la paciente ha realizado (en la mayoría de los casos), previamente, un proceso de estimulación mediante medicación.
Lo habitual es que el transfer (ya sea en fresco o en diferido) se realice con el embrión en fase de desarrollo de día +3 o +5. Durante el proceso, nuestras ginecólogas introducen el mencionado catéter, utilizan el ecógrafo para localizar el lugar óptimo donde depositar el/los embriones y, a continuación, retiran suavemente el catéter.
La transferencia embrionaria dura unos pocos minutos y es posible que, posteriormente, algunas pacientes experimenten pequeñas molestias. A pesar de ello, la sedación solo es necesaria en casos muy excepcionales y complejos.
Tras la intervención, la futura mamá guarda un breve periodo de reposo en la clínica, tras el cual, puede marcharse a casa. Nuestra recomendación a partir de ese momento es no realizar grandes esfuerzos físicos pero, al mismo tiempo, hacer una vida lo más normal posible; evitando el excesivo sedentarismo que pueda provocar en la paciente un estado de angustia y preocupación contraproducente durante un proceso de embarazo.
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Criterios para la transferencia embrionaria: ¿Cuántos embriones se transfieren en cada ciclo?
Una de las dudas más habituales relacionadas con los tratamientos FIV es la cantidad de embriones que se transfieren en cada ciclo. Pues bien, según la ley de reproducción asistida española, se pueden transferir, como máximo, 3 embriones por ciclo.
La recomendación que puedan dar nuestras doctoras dependerá de muchos factores: del historial médico de la paciente, de las causas de la infertilidad, de la edad, de cómo responde al tratamiento, de si ha tenido fallos de implantación o abortos previos, etc.
Aún así, la elección final siempre será de la futura mamá o de la pareja en cuestión.
Los últimos avances tecnológicos de los que disponemos en la clínica, junto con nuestra dilatada experiencia y el desarrollo de las mejores técnicas de reproducción asistida, nos permiten disponer de embriones de mejor calidad, seleccionarlos y sincronizar la transferencia con el momento de mayor receptividad endometrial. Todo esto, acompañado de un tratamiento creado a la medida de la paciente, aumenta la tasa de éxito de embarazo, incluso implantando un único embrión.
Recomendaciones de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF)
En cualquier caso, la SEF establece unas recomendaciones generales respecto al número de embriones transferidos:
- Mujeres menores de 30 años. Un único embrión y nunca tres embriones.
- Mujeres de entre 30 y 37 años. Uno o dos embriones en función de su calidad. A partir del tercer ciclo sin implantación, se valorará la posibilidad de transferir tres embriones si estos tienen baja calidad.
- Mujeres mayores de 37 años. Dos embriones. Si no hay ninguno de buena calidad, observar la posibilidad de transferir tres.
- Ovodonación. En este caso, los óvulos son de calidad alta (tipo A). Se recomienda transferir uno o dos embriones en función de la edad de la mujer y de su receptividad endometrial.
Estrategia de tratamiento 100% personalizada
Por supuesto, estas recomendaciones deberán adaptarse siempre a cada mujer y, para ello, valoraremos previamente todas y cada una de las circunstancias de cada caso concreto. Pues, en Equipo Juana Crespo, no realizamos tratamientos basados en protocolos estandarizados, sino que cada fase del proceso (desde la primera visita hasta el alta gestacional) se crea a la medida de esa paciente en concreto.
Además, contamos con los mejores resultados del sector en casos de alta complejidad y nuestras tasas de embarazo corresponden a resultados por transferencia embrionaria, es decir, tras un único intento.
Si estás pensando en iniciar un tratamiento de reproducción asistida, llámanos al 961 042 557 o escríbenos a info@juanacrespo.es y podrás reservar ya tu primera visita.