La endometriosis es una patología común (afecta a un 15 % de las mujeres en edad fértil de todo el mundo) cuya elevada incidencia hace que sea la primera patología ginecológica por frecuencia.
Cada vez hay más estudios sobre cómo la endometriosis afecta a la fertilidad.
No es casualidad: muchas de las pacientes menores de 35 años que recurren a tratamientos de reproducción asistida con ovodonación en clínicas como la nuestra han sido diagnosticadas de esta enfermedad.
¿Cómo afecta la endometriosis a la fertilidad?
Se denomina endometriosis a la presencia de endometrio fuera de la cavidad uterina.
Esta enfermedad se manifiesta cuando el tejido endometrial que recubre el interior de útero aparece por fuera de este, implantándose en los ovarios, en las trompas, detrás del útero, en los ligamentos uterinos, en intestinos e incluso en la vejiga, formando quistes que se llenan de sangre. Cuando el tejido endometrial penetra en la capa muscular del útero, recibe el nombre de adenomiosis.
Algunos de los síntomas habituales de la endometriosis son dolor menstrual agudo, periodos menstruales abundantes, sangrado entre periodos, dolor antes, durante y/o después de mantener relaciones sexuales, dolor al orinar, fatiga o cansancio continuado.
Aparte de condicionar la calidad de vida de las mujeres que la sufren, la endometriosis es una enfermedad progresiva, que empeora con el tiempo y que puede comprometer eventos fisiológicos claves para la fertilidad.
Algunas posibles causas de la endometriosis que perjudican la fertilidad
Uno de los factores por los que la endometriosis afecta a la fertilidad, es que esta causa adherencias que dificultan la función de las trompas.
En los casos más graves, la distorsión de la anatomía de los genitales por la inflamación y la fibrosis altera la funcionalidad de estos órganos.
Por otra parte, existen mecanismos relacionados con esta enfermedad que hacen que la implantación de los embriones no sea la óptima o que dificultan el desarrollo y calidad de los óvulos debido a la presencia de moléculas proinflamatorias.
En las etapas iniciales de la endometriosis, la presencia de una reacción inflamatoria peritoneal también puede comprometer otros eventos claves para conseguir el embarazo, como la ovulación, el desarrollo embrionario y la implantación.
Además, las mujeres con endometriosis suelen tener menstruaciones muy irregulares, por lo que es difícil controlar su ovulación o sus días fértiles para conseguir un embarazo de manera «natural».
¿Puedo quedarme embarazada si tengo endometriosis?
Si tienes endometriosis, es probable que tus posibilidades de quedarte embarazada disminuyan.
Ante los síntomas de esta enfermedad, es importante acudir al médico o a una clínica especializada para que te informen sobre las opciones que tienes a tu alcance.
Normalmente, en las fases iniciales de la enfermedad, la recomendación es no retrasar demasiado la maternidad.
Dependiendo de la gravedad de tu situación, la presencia de dolor, tu edad y otros factores que afecten a tu fertilidad, los médicos pueden aconsejarte:
- Hacer una Fecundación In Vitro.
- Hacer una Fecundación In Vitro con óvulos de una donante (ovodonación).
En algunas ocasiones, estos tratamientos van acompañados de una cirugía previa.
Esta última se recomienda cuando las trompas están dilatadas (hidrosálpinx), cuando hay endometriomas/quistes endometriales muy grandes o cuando el acceso a los ovarios para hacer la punción folicular y extraer ovocitos está limitado.
Las mujeres con endometriosis que quieren retrasar o planificar su fertilidad también pueden recurrir a la vitrificación de óvulos.
¿Qué es la vitrificación de óvulos?
La vitrificación de gametos es una técnica que consiste en obtener los óvulos/espermatozoides y conservarlos a temperaturas muy bajas durante un tiempo indefinido.
Los óvulos se extraen gracias a la aspiración de líquido folicular.
Una vez fuera, este líquido se observa con un microscopio para encontrar los ovocitos que son maduros y con buenas características. Estos ovocitos seleccionados se congelan mediante un proceso que se llama vitrificación, se someten a una congelación ultrarrápida en contenedores de alta seguridad con nitrógeno líquido, donde se conservan a – 196 °C.
En este entorno controlado, los ovocitos pueden mantener su capacidad reproductiva durante años.
La criogenización se utiliza, entre otras cosas, para planificar la fertilidad en mujeres que desean retrasar su maternidad o que quieren conservar sus ovocitos debido a cuestiones médicas, como algunas cirugías o tratamientos oncológicos, o a enfermedades que pueden comprometer el embarazo, como la endometriosis grave.
De esta forma, es posible planificar tratamientos de reproducción asistida y ciclos FIV en el futuro.
Endometriosis y planificación de la fertilidad
La vitrificación de ovocitos es una alternativa que tienen las mujeres con endometriosis para conseguir un embarazo con sus propios óvulos, aunque la severidad de su enfermedad avance.
Hay que recordar que esta patología, que aparece y se desarrolla a lo largo de la vida fértil de la mujer, suele agravarse con el tiempo.
La relación entre endometriosis y disminución de la calidad ovocitaria se debe a que los quistes endometriósicos que crecen en el ovario destruyen parte de la dotación de óvulos, disminuyendo la reserva ovárica.
De la misma forma, si es necesario realizar una cirugía para extraer dichos quistes, la disminución de dicha reserva también puede acentuarse.
Extraer óvulos cuando la endometriosis aún no se encuentra muy avanzada para vitrificarlos y guardarlos permite a muchas pacientes jóvenes con esta enfermedad no perder la oportunidad de ser madres llegado el momento.
La vitrificación de ovocitos es compleja, debe hacerse en centros/clínicas autorizadas y requiere el uso de tecnología de última generación por parte de profesionales especializados como ocurre en Equipo Juana Crespo.
Conoce más sobre este proceso en nuestra web. Y si tienes dudas al respecto, no dudes en preguntarnos.